Venezuela:40% de los aviones comerciales están parados por falta de repuestos

El reciente anuncio de Conviasa de suspender sus actividades comerciales para "hacer una amplia auditoría técnica y evaluar los protocolos y procedimientos en uso" encendió las alarmas en el sector aeronáutico civil nacional.
Aunque varios de sus representantes niegan que la situación de la aerolínea estatal creada en noviembre de 2005 sea un reflejo de la industria, reconocen que están enfrentando una tremenda crisis.
Afirman que aproximadamente 40% de la flota de aviones de las líneas aéreas venezolanas está parada por falta de repuestos, lo que merma la calidad del servicio.
La regulación de tarifas que impuso el Gobierno desde hace 6 años, el aumento de los costos operaciones por el alza del combustible y por la devaluación de inicios de año, la escasa y retrasada entrega de divisas por parte de Cadivi y la eliminación del mercado permuta son las principales causas del problema. "Todo esto es lo que tiene descapitalizadas a las empresas y buscando la manera de sobrevivir", señaló un vocero del sector aeronáutico.
Sólo por la devaluación, hasta abril pasado las aerolíneas acumulaban una pérdida de 524.000 dólares. "El costo financiero de Cadivi es muy alto. Si no nos aprueban los recursos a tiempo, no podemos esperar nueve meses por ellos para mantener las operaciones", dijo. El organismo terminó de liquidar las solicitudes de divisas de 2009 en septiembre de 2010.

El sistema de transacciones de títulos en moneda extranjera -mecanismo que creó el Gobierno para sustituir el mercado permuta-, no es, según aseguraron los representantes del sector, una salida para la industria. "Es un sistema para pequeñas y medianas empresas.
Las grandes tienen las divisas limitadísimas. Hace poco subastaron unos títulos, y lo máximo que otorgaron a cada compañía fueron 60.000 dólares y con eso una empresa aérea no hace nada. Sólo una turbina puede llegar a costar 180.000 dólares", indicó otra fuente.
Además de la adquisición de repuestos, la formación de los pilotos también está afectada por la insuficiente y lenta entrega de divisas. Voceros de la industria afirman que las aerolíneas deben contar con el flujo constante de dólares para poder mandar a sus aviadores a los cursos regulares en el exterior, exigidos por el Instituto Nacional de Aviación Civil.
"Esa constante formación es lo que hace que un piloto pueda tomar una decisión en un momento dado".
De la más nueva a la más vieja. "El propio Estado es el que ha convertido a las líneas aéreas en ineficientes, porque ninguna puede traer un avión moderno", aseguraron.
En la década de los años 80, según recordaron los voceros de la industria, Venezuela tenía la flota de aviones más nueva de Latinoamérica. Ahora es la más vieja del continente. Precisaron que las aeronaves tienen en promedio 30 años. Sin embargo, aseguraron que están en buen estado.
Los representantes de la industria dijeron que, paradójicamente, una de las flotas más nuevas es la de Conviasa. "Salvo los aviones Boeing 767 y 757 de Santa Bárbara Airlines y los Bombardiers de Conviasa, el resto de las líneas aéreas nacionales utilizan aviones más antiguos".
A pesar de esto, Venezuela mantiene la categoría 1 que otorga la Agencia Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA, por sus siglas en inglés) porque cumple con los estándares entre 75% y 80%.
No obstante, la Agencia de Seguridad y Transporte, organismo que creó Estados Unidos después de los hechos del 11 de septiembre de 2002, no ha podido hacer evaluaciones de los aeropuertos de Valencia y Puerto Ordaz, que tienen solicitudes de abrir rutas internacionales, porque según las fuentes, el Gobierno venezolano no lo ha permitido.
Pese al panorama que exhibe la industria aeronáutica civil nacional, sus representantes no creen que esté colapsada, pero sí con una camisa de fuerza que le puso el Gobierno.
Aseguraron que el Estado no tiene una política de desarrollo del sector sino de control, visión con la que la industria no saldrá de la crisis donde está.
A juicio de los voceros del sector aeronáutico, los controles de cambio le han hecho mucho daño a la industria. En el pasado se quedaron Avensa, Servivensa y Zuliana en tierra por ellos; y recientemente le tocó a Lai.
"Tenemos 11 años con este Gobierno y es inexplicable que sólo una empresa aérea venezolana, Santa Bárbara Airlines, que inició vuelos a Madrid, haya sido autorizada a volar nuevos destinos al exterior. Las autoridades han sido demasiado inflexibles con los permisos para abrir rutas internacionales", afirmaron.